Preocupación existe entre los vecinos del sector de Las Barrancas, comuna de
Coquimbo, debido a la construcción de una planta industrial incineradora de residuos
hospitalarios (REAS) que está instalada en el lugar pero que no contaría con la autorización
sanitaria respectiva.
El problema surge en que pese a que la planta no tendría dicha autorización (según consigna
un documento de la Secretaría regional ministerial de Salud) la municipalidad sí habría
otorgado el permiso para que ésta se construyera.
Un nuevo agravante es que la obra se encuentra casi terminada.
¿Cómo se explica, entonces, que faenas de estas características se desarrollen sin autorización
y además esté ubicada en una zona que no es industrial? Es lo que se pregunta Oscar Collao,
presidente del Comité Pro adelanto Ruta 427.
“En el contorno hay producción de alimentos. La gente tiene limonales, paneles de abeja,
árboles frutales, pequeños huertos. Eso complica más la situación. Hemos pedido ayuda y
apoyo y no hemos obtenido respuestas. Actualmente estamos preparando una querella
criminal contra la municipalidad y contra la empresa Transportes Anfibio Ltda. Los vecinos,
tanto de Las Barrancas como de la ruta D427 están sumamente preocupados, sobre todo
porque hay adultos mayores y esa zona no tiene gran ventilación. Todos esos residuos
químicos lo aspirará la gente”, refuerza Collao.
Desde la gestión parlamentaria, la diputada Nathalie Castillo ha visitado el lugar junto a
vecinos y dirigentas, además de oficiar a la Seremia de Salud.
“Hasta la fecha no hemos recibido ningún tipo de oficio de respuesta que nos entregue
tranquilidad, principalmente por la salud de las personas debido a riesgo sanitario y
ambiental. Lo primero es conocer si la Dirección de Obras municipales de Coquimbo entregó
autorización para la construcción de esta obra que se encuentra emplazada en lugares donde
existe agricultura y cultivo; y por otra parte que la Seremi de Salud, más allá de la
fiscalización que nosotros solicitamos, nos entregue detalladamente un informe y si la planta
tiene o no Resolución Sanitaria para su funcionamiento. No queremos en Las Barrancas o en
cualquier sector Rural- Cordillera de Coquimbo problemas asociados a esa planta de residuos
orgánicos que, además, no cuenta con la aprobación de las vecinas y vecinos”, señaló la
parlamentaria.
Finalmente, para Nelly Galleguillos, presidenta de la Junta de Vecinos Unión Las Barrancas
la planta les va a afectar la calidad de vida “por la polución y malos olores. Hay vecinos
crónicos, niños y adultos mayores. No porque estemos en un sector rural vamos a permitir
este tipo de empresas, donde ni siquiera fuimos consultados. No hubo nunca una información
a nosotros como dirigentes”.