El Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de La Serena condenó hoy –domingo 22 de agosto– al subteniente de Carabineros Kenneth Adolf Berngeher Rojas, a las penas de 10 años y un día y 5 años y un día de presidio, en calidad de autor de los delitos de homicidio simple consumado y homicidio simple frustrado, respectivamente. Ilícitos perpetrados en febrero de 2019, en la comuna de Andacollo.
En fallo unánime (causa rol 73-2020), el tribunal –integrado por las magistradas Victoria Gallardo Labraña (presidenta), Jimena Pérez Pinto (redactora) y María Inés Devoto Torres– aplicó, además, a Berngeher Rojas las accesorias legales de inhabilitación absoluta perpetua para cargos y oficios públicos y derechos políticos y la inhabilitación absoluta para profesiones titulares mientras duren las condenas.
Una vez que el fallo quede ejecutoriado, el tribunal dispuso que se proceda a la toma de muestras biológicas del sentenciado para determinar su huella genética e inclusión en el registro nacional de ADN de condenados.
Persecución
El tribunal dio por acreditado, más allá de toda duda razonable, que, aproximadamente a las 23 horas del 16 de febrero de 2019, el acusado, Kenneth Adolf Berngeher Rojas, ejercía labores preventivas en la vía pública de la ciudad de Andacollo, en su condición de subteniente de Carabineros, a cargo de la patrulla que circulaba a bordo del furgón policial PPU Z.7440, sentado en el asiento del copiloto. En los momentos en que el vehículo policial circulaba en dirección norte por calle Matadero al llegar a la intersección con calle Colón, el acusado se percató que se desplazaba en sentido contrario el automóvil Volkswagen, modelo Golf A4 1.6, color plateado metálico, PPU ZX.6746, instantes en que su conductor, José Manuel Alejandro Rivera Pizarro, a fin de evitar su fiscalización lo condujo por calle Colón hacia el oriente.
“En tales circunstancias, el acusado ordenó al piloto del vehículo policial efectuar un seguimiento al vehículo conducido por Rivera Pizarro (…) el acusado Kenneth Adolf Berngeher Rojas, haciendo uso de su arma de servicio, pistola marca Taurus 9 mm, modelo PT 917 C, número de serie TEZ03361, disparó desde el furgón policial en dirección al Volkswagen Golf, estando ambos vehículos en movimiento”.
“El primer impacto –prosigue– alcanzó el parachoques trasero derecho del referido vehículo. Luego, decidió disparar en una segunda oportunidad, impactando en el parabrisas trasero, proyectándose la munición hacia el asiento del piloto, José Rivera Pizarro, traspasando la butaca de su asiento, lo que le provocó una herida de proyectil balístico, anterior y posterior de tórax, con salida de proyectil. Acto seguido y en las mismas condiciones antes descritas, el acusado decidió disparar una tercera munición, cuyo proyectil balístico traspasó el mismo parabrisas trasero e impactó la cabecera del asiento del copiloto, para alojarse en definitiva en la zona cervical posterior de su ocupante, Tania Larisa Morgado Cortés, causándole una herida de bala cervical sin salida de proyectil/traumatismo raquimedular C3, lo que le provocó la muerte, el día 20 de febrero de 2019 a las 17.48 horas, en el Hospital de Coquimbo”.