En diciembre del año pasado un nuevo coronavirus irrumpió en la vida humana. La patología -que al principio se concentraba en Wuhan, China- en pocos días se propagó por todo el mundo causando alrededor de dos millones de personas enfermas y más de 100 mil fallecidos, a la fecha.
En Chile el virus también ha causado un estado de emergencia y una demanda superior a la que hay normalmente en el sistema de salud; aunque el número de muertos es menor al de otras naciones, los casos de contagio siguen aumentando con cada jornada, oscilando entre 300 y 500 personas infectadas nuevas cada día.
En los casi 5 meses en que el mundo se ha enfrentado al COVID-19, los científicos han podido detectar que los grupos de riesgo son los mayores de 70 años y personas que sufren enfermedades autoinmunes o patologías preexistentes como la diabetes y la hipertensión. Ellos están expuestos a tener peores consecuencias si llegan a contraer el virus.
¿Cómo se distribuyen los contagios por edad y sexo?
En nuestro país, y según el octavo informe de epidemiología del Ministerio de Salud del 15 de abril “de los casos confirmados, y notificados en EPIVIGILA, la mediana de edad es de 40 años, donde el 3% correspondieron a menores de 15 años, el 22% a personas de 15-29 años, el 34% a personas de 30-44 años, el 30% a personas de 45-64 años, mientras que el 11% restante a adultos de 65 y más años”.
El grupo etario más afectado han sido aquellos que tienen entre 30 a 34 años con una tasa de 67,4 por cada 100.000 habitantes.
En segundo lugar están las personas de entre 35 y 39 años con una tasa de 64,1. En tanto los que menos se han contagiado pertenecen al rango etario de 5,6 a 9 años, quienes solo registran 5 contagios por cada 100.000 habitantes.