La Seremi de Desarrollo Social de la región de Coquimbo permanece cerrada debido a la paralización de sus funcionarios, quienes protestan por la eventual transferencia de programas y recursos a otros servicios, situación que genera incertidumbre en el personal y en la continuidad de las labores que históricamente ha asumido esta repartición.

Heins Alvarado, presidente de la Asociación de Funcionarios (Asofumi), explicó:
“Estamos de brazos caídos, esta situación nos afecta directamente como servicio. Impacta en los funcionarios y en el traspaso de programas que siempre han estado a cargo de nuestra Seremi”.
La paralización forma parte de una movilización nacional, y ya se han sostenido conversaciones con distintas autoridades. Según Alvarado, este martes 30 de septiembre se sabrá si las observaciones planteadas quedarán incorporadas de manera permanente en el proyecto de Ley de Presupuestos.
Mientras tanto, la oficina regional no está atendiendo al público, limitándose a recibir requerimientos, sugerencias y reclamos. “Los programas que mantenemos en coordinación con los municipios no están operativos, al menos mientras dure esta movilización”, indicó el dirigente.
Respuesta oficial
El seremi de Desarrollo Social y Familia, Celso López, reconoció la preocupación de los trabajadores, pero aclaró que el debate aún está en curso:
“Entendemos la inquietud de las y los funcionarios, pero queremos ser claros en que la Ley de Presupuesto recién inicia su tramitación y la definición final se dará en el Congreso”.
De esta forma, el eventual traspaso de programas aún no es oficial y dependerá de la discusión parlamentaria.