Cuatro mujeres emprendedoras de esa comuna, de los rubros de alojamiento y gastronómico, lideran la consolidación de la oferta local con apoyo de CORFO, rescatando su patrimonio cultural y natural mediante experiencias como el astroturismo, la cosmovisión diaguita y la calidez de su gente.
El proyecto Red Asociativa Combarbalá Viva, respaldado por CORFO a través del programa Redes Asociativas, se ha consolidado como una iniciativa clave para fortalecer la actividad turística en la comuna. Liderado por cuatro mujeres emprendedoras, busca posicionar a Combarbalá como parte esencial de la oferta de los valles del Limarí, poniendo en valor su patrimonio cultural y natural mediante propuestas de turismo rural, astroturismo, cosmovisión diaguita, gastronomía local y hospitalidad cercana.
La red representa el trabajo colaborativo y asociativo, priorizando el interés colectivo por sobre el individual y proyectando un destino con identidad propia. Cada integrante aporta un sello particular:
- Myriam López, con Hostal y Restaurante Alto Algarrobal, fusiona hospitalidad rural y sustentabilidad.
- Alejandra Beltrán, desde Hostería Beltrán, mantiene la tradición familiar y la memoria colectiva.
- Rosa Castro, con Restaurante El Temucano, ofrece cocina típica reconocida como punto de encuentro entre locales y visitantes.
- Solange Jorquera, con Hostal Apuwara, impulsa un espacio de wellness que combina astronomía, cultura local y experiencias de desconexión.
El nombre “Combarbalá Viva” simboliza la inspiración de un territorio que late, crece y se transforma, reviviendo sus raíces, activando su presente y proyectando su futuro.
Primeros logros
Durante su primer año, la red dio forma a una oferta conjunta de experiencias auténticas, como la observación de cielos estrellados en el Observatorio Cruz del Sur, recientemente certificado con el sello internacional Starlight, lo que lo posiciona como referente mundial en astroturismo. También destacan vivencias como compartir una mateada con leche de cabra acompañada de queso y pisco local al aire libre, contemplando el atardecer o los cielos nocturnos, además de recorridos que conectan con la historia y la identidad del territorio.
Próxima etapa
A partir de octubre, el segundo año del proyecto se enfocará en la comercialización y el posicionamiento regional y nacional. Se contemplan participaciones en ferias turísticas, un famtrip con operadores y agencias de viaje, campañas de marketing digital y alianzas estratégicas para consolidar a Combarbalá como un destino emergente de la Región de Coquimbo, reconocido por su autenticidad, su gente cercana y su clima privilegiado.
El director regional de CORFO, Andrés Zurita, destacó que la Red Asociativa Combarbalá Viva “no solo viene a incrementar la competitividad de las pymes participantes que lideran estas mujeres empresarias, sino también a mejorar su oferta de valor para acceder a nuevos mercados, gracias a estrategias de negocios colaborativos e innovadores”.
Voces de las protagonistas
Para Solange Jorquera, la iniciativa responde a un anhelo previo a la pandemia: “Ha sido muy gratificante, estoy agradecida de que nos dieran esta oportunidad, porque individualmente es difícil lograrlo. Espero seguir trabajando y concretar nuestras ideas”.
En tanto, Rosa Castro aseguró estar “muy entusiasmada de ser parte de esta red asociativa, ya que representa una oportunidad única de contribuir al desarrollo de mi comunidad. Mi motivación es ver crecer el turismo en nuestra localidad, creando experiencias memorables para quienes nos visitan”.
Alejandra Beltrán recalcó el valor del trabajo colaborativo: “Siempre se ha dicho que en asociatividad se pueden lograr mejor las cosas. Espero que en esta red podamos dar grandes pasos en el turismo para la zona”.
Finalmente, Myriam López sostuvo que su participación implica un compromiso personal con Combarbalá: “Es una oportunidad de aportar mi experiencia y motivación para que nuestra comuna sea reconocida no solo por sus riquezas naturales y culturales, sino también por la calidad de sus servicios”.
