En un nuevo hito para el comercio exterior regional y la integración logística entre Chile y Argentina, el Terminal Puerto Coquimbo (TPC) concretó exitosamente el embarque de contenedores con fruta fresca proveniente de Argentina, con destino final en Canadá.
La carga, correspondiente a cítricos exportados por la empresa trasandina FGF Trapani, fue embarcada en el buque MSC Polonia III, de la naviera Mediterranean Shipping Company (MSC), que recala en el Sitio N.º 3 del puerto coquimbano. Este hecho marca la segunda temporada consecutiva de exportación de productos frescos desde el terminal regional.
“Esta exportación representa la consolidación de una estrategia comercial desarrollada durante años y que incluyó el trabajo conjunto de autoridades y empresas de ambos países”, señaló TPC en un comunicado oficial.
Macarena Lemus, subgerente comercial de TPC, destacó que esta operación no solo reafirma el rol del puerto como plataforma exportadora, sino que abre nuevas oportunidades:
“La exportación de cítricos de Tucumán es reflejo de un trabajo sostenido que comenzó incluso antes de la construcción del Sitio 3. Hoy avanzamos con carga refrigerada, pero el objetivo a corto plazo es ampliar el flujo a carga seca, como minerales de la zona, e incluso fomentar la importación hacia Argentina”.
La operación contempló el cruce limítrofe por el Paso San Francisco, actualmente habilitado para el tránsito de carga, y fue gestionada en coordinación con los Despachantes de Aduana All Brigde.
Como parte de esta estrategia de integración logística binacional, Sebastián Flores, director ejecutivo de Southland Shipping Lines (SSL), confirmó que están trabajando en un programa colaborativo con empresas del noroeste argentino para utilizar el Puerto de Coquimbo como su vía de salida hacia el mundo:
“Buscamos que más empresas argentinas exporten por el Pacífico a través de TPC, disminuyendo sus costos logísticos y tiempos de tránsito”, afirmó.
Este avance consolida a Coquimbo como una puerta de salida estratégica hacia los mercados del Asia-Pacífico, y permite robustecer los volúmenes que alimentan los servicios marítimos regulares de TPC, contribuyendo también a reducir la estacionalidad de la carga nacional chilena.