Plan contempla traslado seguro, atención veterinaria, registro individual y eventual entrega a organizaciones protectoras.
Ante el aumento sostenido de denuncias por la presencia de animales sueltos —principalmente caballos, vacas y burros— en sectores urbanos y rurales de La Serena, la Municipalidad presentó un nuevo protocolo de acción para el traslado y resguardo de estos ejemplares, con el fin de mejorar la seguridad vial y garantizar el bienestar animal.
El plan fue dado a conocer en la última sesión del Concejo Comunal, bajo el nombre de “Protocolo para el Traslado y Resguardo de Animales en la Vía Pública”, y establece una serie de medidas logísticas, sanitarias y legales para abordar de manera integral esta problemática que ha generado preocupación en diversos barrios de la comuna.
Corral temporal en el Parque Pedro de Valdivia
La alcaldesa Daniela Norambuena explicó que los animales serán retirados por funcionarios de Seguridad Ciudadana, quienes los trasladarán en un carro de arrastre especial que será adquirido mediante fondos del royalty minero. Este vehículo contará con las condiciones sanitarias necesarias para asegurar un transporte seguro y digno.
Los ejemplares serán alojados temporalmente en un corral habilitado en el Parque Pedro de Valdivia, donde recibirán atención médica por parte del equipo veterinario municipal. “Vamos a disponer de un espacio seguro, atención veterinaria y alimentación. Cuando los propietarios aparezcan, deberán pagar las multas correspondientes y, si son reincidentes, incluso podrían enfrentar órdenes de arresto”, señaló la jefa comunal.
Además, la alcaldesa adelantó que se está evaluando entregar estos animales en adopción a organizaciones con experiencia en tenencia responsable, en casos donde los dueños no se presenten o exista evidencia de maltrato.
Condiciones sanitarias y monitoreo permanente
El veterinario municipal Francisco Rojas destacó que el protocolo fue elaborado tomando como referencia modelos nacionales e internacionales. “Buscamos siempre el bienestar del animal. Tendrán atención médica, control de parásitos, vacunación y un entorno limpio y controlado”, indicó.
Cada animal será registrado de manera individual y monitoreado diariamente. Las instalaciones mantendrán protocolos de limpieza y desinfección para prevenir enfermedades y asegurar una estadía segura durante el proceso de custodia.
Aspectos legales y destino final
Conforme a la legislación vigente, los animales sueltos son considerados bienes muebles, lo que permite al municipio mantenerlos bajo resguardo por un periodo mínimo de tres meses. Si durante ese tiempo no aparece el propietario, podrán ser entregados en adopción a entidades acreditadas o, como última opción, rematados legalmente. El protocolo contempla extender el proceso hasta un máximo de seis meses, asegurando su cuidado mientras se resuelve su destino final.
Esta nueva estrategia municipal busca equilibrar el respeto por la vida animal con la necesidad de ordenar el espacio público y resguardar la seguridad de conductores y peatones, en el marco de una política más amplia de convivencia urbana.
