Dos voluntarios del Cuerpo de Bomberos de Los Ángeles, entre ellos el comandante de la institución, fueron detenidos tras ser acusados de sustraer agua de un grifo público para venderla a un particular.
El mayor de Carabineros, Paul Rossel, confirmó el hecho a La Radio, señalando que los involucrados cargaron el agua en un carro de la Tercera Compañía de Bomberos. La situación fue denunciada por personal municipal, lo que derivó en la detención de los responsables.
Según información proporcionada por Carabineros, los detenidos habrían intentado comercializar el agua extraída llenando una piscina en el sector de Quelen Quelen al momento de ser sorprendidos. El líquido era descargado desde el carro de Bomberos mediante mangueras.
Por este motivo, los voluntarios fueron arrestados bajo la acusación de hurto de bien de uso público.
La Superintendencia del Cuerpo de Bomberos de Los Ángeles anunció que emitirá una declaración oficial una vez que se recopilen todos los antecedentes del caso.
