Aunque los embalses de La Paloma y Puclaro registran leves aumentos tras los recientes frentes de lluvia, la región continúa enfrentando más de 15 años de déficit hídrico.

Tras el fin de la temporada invernal, Aguas del Valle presentó un balance del estado hídrico en la región. Según el gerente regional, Andrés Nazer, el embalse La Paloma alcanza actualmente un 11% de su capacidad, mientras que Puclaro, en la provincia de Elqui, llega al 22% luego de los últimos sistemas frontales de agosto.
En cuanto a precipitaciones, La Serena y Ovalle mostraron un superávit de 10%, mientras que Illapel mantiene un déficit cercano al 30%, reflejando la persistencia de la sequía.
Pese a este escenario, desde la sanitaria destacaron que no ha sido necesario aplicar racionamiento de agua potable, gracias a las inversiones en infraestructura realizadas durante la última década.
“Hemos destinado más de $80.000 millones a nuevas conducciones, pozos y acuerdos de uso de agua de embalses. Esto, junto con la coordinación con autoridades y juntas de vigilancia, ha permitido garantizar el suministro y proteger a miles de hogares”, indicó Nazer.