Las intensas lluvias que afectaron a la comuna de Coquimbo dejaron múltiples consecuencias, especialmente en zonas costeras como Guanaqueros y Tongoy. Aunque las precipitaciones fueron valoradas por su aporte hídrico, también provocaron serios problemas de infraestructura y seguridad para los residentes.
Durante un recorrido en terreno, el alcalde Ali Manouchehri reconoció que el fenómeno climático “nos trae complejidades bien importantes”, destacando los daños provocados en distintos puntos de la comuna puerto.
Uno de los eventos más alarmantes ocurrió en Tongoy, donde un enorme socavón se abrió en plena zona residencial, comprometiendo una vivienda de uso veraniego. El desprendimiento de tierra destruyó el cierre perimetral, un poste de alumbrado público y arrastró los medidores de agua de tres inmuebles.
Anabela Barrera, hija del propietario afectado, relató al medio local Diario El Día que llegó desde Ovalle tras ser notificada por vecinos. “A simple vista la casa no presenta daños internos, pero hay un muro exterior quebrado que debe ser revisado por especialistas”, indicó. Afortunadamente, no había personas al interior al momento del colapso.
El terreno dañado corresponde a un sitio compartido por familiares, donde viven sus tías en casas colindantes. La preocupación crece entre los residentes por la posibilidad de nuevos deslizamientos.
Además del socavón, otros puntos de Tongoy quedaron intransitables. En una calle de tierra, una zanja de gran profundidad atrapó a varios vehículos. Una camioneta terminó suspendida sobre una cavidad de casi dos metros, dejando expuestas tuberías y generando peligro estructural.