La tranquilidad habitual de la isla se vio alterada durante la mañana de este miércoles, luego de que el fuerte terremoto de magnitud 8.8 registrado frente a las costas del norte de Rusia activara un protocolo de alerta de tsunami para gran parte del litoral chileno, incluyendo el territorio insular de Rapa Nui.
A eso de las 09:30 horas, las autoridades locales y Senapred confirmaron la llegada del tren de olas a las costas de la isla, generando un inusual y evidente retiro del mar, seguido de un repentino aumento del nivel del agua.
Videos registrados por habitantes y visitantes muestran el momento exacto en que el mar retrocede varios metros para luego regresar con fuerza, sin llegar a causar daños estructurales significativos pero sí provocando gran preocupación entre la comunidad.
Las sirenas de evacuación se activaron con antelación, permitiendo que las personas se desplazaran hacia zonas seguras, cumpliendo con el protocolo de evacuación hacia la cota 30. Las clases fueron suspendidas y los comercios cerraron durante varias horas como medida preventiva.“Fue una escena que no se ve todos los días. El mar se fue hacia atrás como si respirara profundamente, y luego volvió más agresivo.
Muchos turistas se asustaron, pero afortunadamente la comunidad respondió rápido”, relató una habitante de Hanga Roa.El alcalde de la comuna señaló que no se reportaron personas lesionadas ni viviendas afectadas, y valoró la coordinación entre la municipalidad, Carabineros y la Armada. “Esta vez la prevención fue clave. La alerta llegó a tiempo y pudimos actuar con rapidez”, expresó.
El Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada (SHOA) continuará monitoreando el comportamiento del mar, ya que no se descarta la llegada de nuevas olas menores durante las próximas horas.Rapa Nui ha vivido una jornada tensa pero ejemplar en cuanto a organización y respuesta ciudadana, recordando que la naturaleza sigue siendo impredecible, y que la preparación puede marcar la diferencia entre una emergencia y una tragedia.