Con un 67% de adhesión en los hospitales de alta complejidad, se han priorizado solo cirugías oncológicas y de urgencia. Autoridades advierten sobre las limitaciones presupuestarias y las consecuencias administrativas para quienes abandonen funciones.
El Servicio de Salud Coquimbo se refirió oficialmente a las movilizaciones que están afectando el funcionamiento de las unidades de pabellón en los hospitales de La Serena, Coquimbo y Ovalle, donde la adhesión alcanza el 67%. A pesar de la paralización parcial, se ha garantizado la realización de cirugías oncológicas, de urgencia y casos clínicamente impostergables.
Desde la institución recalcaron que comprenden las demandas de mejoramiento salarial de los funcionarios, sin embargo, advirtieron que la implementación del proceso de normalización de grados implica un alto compromiso financiero que supera actualmente la disponibilidad presupuestaria del sistema público de salud.
“Todos los esfuerzos del Ministerio de Salud y del Servicio están enfocados en disminuir los tiempos de espera para cirugías y consultas, en un contexto económico muy restringido. Tenemos la obligación de priorizar los recursos en esa línea”, señaló el director del Servicio de Salud Coquimbo, Ernesto Jorquera.
Advertencia ante abandono de funciones
Respecto a la movilización, Jorquera recordó que el incumplimiento de funciones puede acarrear consecuencias administrativas, conforme al ordenamiento jurídico vigente.
“Abandonar las funciones tiene un rigor administrativo que puede implicar investigaciones, sumarios e incluso descuentos. Es lamentable llegar a este punto, pero estamos en un contexto donde debemos mantener esta posición con responsabilidad institucional”, afirmó.
La autoridad también explicó que implementar un reajuste sin respaldo financiero pondría en riesgo la continuidad y calidad de la atención para más de 757 mil habitantes de la región, afectando tanto la atención presente como la sostenibilidad futura del sistema.
Llamado al diálogo
Finalmente, el Servicio de Salud Coquimbo reiteró su compromiso con el bienestar de sus funcionarios y llamó a retomar el diálogo constructivo, apelando a la responsabilidad que implica trabajar en la Red Asistencial Pública, especialmente ante el impacto que la paralización tiene sobre los pacientes y sus familias.
“Seguiremos buscando soluciones que sean sostenibles, pero sin poner en riesgo el equilibrio del sistema de salud ni la atención a la ciudadanía”, concluyó Jorquera.
