Junto al diputado Daniel Manouchehri, el jefe comunal planteó en la Superintendencia de Casinos de Juegos la urgente necesidad de reforzar la fiscalización a los diversos locales con máquinas tragamonedas instalados en el centro de Coquimbo.Liderando acciones a nivel regional y nacional para erradicar los casinos ilegales en las comunas de la región, el alcalde de Coquimbo Ali Manouchehri, acompañado del diputado Daniel Manouchehri llegó hasta la Superintendencia de Casinos de Juegos, para solicitar mayor fiscalización y erradicación de locales con tragamonedas que no cumplen la normativa y que han proliferado en la zona centro de Coquimbo.Tras la reunión, el alcalde Ali Manouchehri señaló que esta presentación busca avanzar con la recuperación de espacios en la zona centro y la reactivación de esta área vital para el desarrollo económico de la comuna, erradicando locales que operen al margen de la ley. “El municipio de Coquimbo ha liderado a nivel nacional la recuperación de espacios públicos. El plan del centro ha tenido un éxito que ha sido reconocido a nivel nacional y por lo mismo, hoy día, junto al diputado Manouchehri, vinimos a una reunión con la Superintendencia de Casinos para plantear la difícil situación que se está enfrentando, no sólo en la comuna de Coquimbo, sino que también en las diferentes comunas de la región, con respecto a los casinos ilegales. El trabajo que vamos a empezar a realizar con ellos nos permitirá recuperar aquellos espacios, desbaratar el funcionamiento de estos casinos de manera ilegal y, por supuesto, ir haciendo de Coquimbo una mejor ciudad”.Por su parte, el diputado Manouchehri manifestó que los casinos ilegales se han convertido en una gran problemática tanto para Coquimbo para como otras comunas de Chile, por lo que es urgente trabajar en conjunto con la Superintendencia, acordando diversas acciones que buscan reforzar las fiscalizaciones a los distintos locales en conjunto con Seguridad Pública y otras instituciones y servicios y así “ver cómo combatir este verdadero flagelo social que tenemos, que ha significado espacios que están absolutamente fuera de la ley, que se transforman en centros que no tienen ningún tipo de fiscalización, que los delincuentes pueden encontrar un lugar para cometer sus ilícitos, para poder tener lavado de dinero, para poder efectivamente eludir impuestos que deberían ir a nuestra ciudad y a nuestra gente”, concluyó el parlamentario.