A raíz de la crisis financiera que vive el Municipio de Coquimbo, la casa consistorial porteña, está llevando a cabo un “Plan de Austeridad”, una serie de medidas tendiente a reducir costos y ahorrar recursos para destinarlos a mitigar la deuda municipal existente.
Según los estados financieros municipales, la deuda vencida y actualmente exigible al día 30 de junio, ascendería a más de $32 mil millones, proyectando para el 31 de diciembre una suma superior a los $40 mil millones, de ahí la urgencia de llevar a cabo una serie de acciones en el más breve plazo.
De acuerdo a lo señalado por el Alcalde de Coquimbo Alí Manouchehri, la actual situación del municipio es compleja, pues “Estamos enfrentando la peor crisis en la historia financiera en la Municipalidad de Coquimbo”.
La primera autoridad comunal detalló que, entre las medidas y las acciones ejecutadas durante estos días, se incluyen “una reunión con el Ministro de Hacienda, para llevar a cabo un Leaseback que nos va a permitir tener un poco más de oxígeno para afrontar esta terrible crisis financiera. A su vez, ítems pequeños, nos ha permitido ahorrar recursos, como los vehículos destinados a la Alcaldía, impresiones y Gastos de Representación que hemos eliminado, que, aunque parezcan pequeños, terminan siendo recursos que nos van a servir para ir aplacando la deuda”.
Agregó que, a nivel interno, se avanzó en la nivelación del recurso humano, “que nos ha permitido darle un poco de justicia al tema de las remuneraciones, a la hora de igualar por nivel educacional y antigüedad laboral, lo que nos va a significar una disminución a los gastos”.
En tanto, y desde el punto de vista de la recaudación de recursos, Manouchehri señaló que “hemos ido trabajando en conjunto con la Tesorería General de la República para optimizar los cobros y buscar todos los mecanismos pertinentes para ir ordenándonos financieramente y aplacar la deuda. Según tenemos proyectado, todas estas acciones nos van a permitir una recuperación cercana a los $2 mil millones de pesos”, puntualizó
