Las olas de calor serán cada vez más frecuentes en todo el mundo, según científicos, que responsabilizan al cambio climático provocado por el ser humano.por Rodrigo Pérez Maldonado -Jueves, 25 de Julio de 201948
Millones de europeos vivieron un jueves sofocante por la ola de calor, la segunda en menos de un mes, que culminó con récords de temperatura en Alemania, Bélgica y Holanda, así como en París, donde se rebasaron los 42 ºC.
La capital francesa batió su récord de calor con 42,6 °C registrados a las 16H32 (14H32 GMT). Es la segunda vez que las temperaturas en la Ciudad de la Luz superan 40°C. La primera fue el 28 de julio 1947, cuando el mercurio marcó 40,4 °C.
Para hacer frente al calor apabullante, parisinos y turistas buscaban un poco de frescura en las fuentes de París, como la del Trocadero, frente a la Torre Eiffel, que se convirtió en una piscina al aire libre.
Los usuarios de los transportes públicos sufrían también los rigores de la canícula. “¡Hace muchísimo calor en el metro, es insoportable!”, dijo a la AFP Petra Ulm, una austriaca de 34 años instalada en Francia.
“Hay muchísimas personas, no hay aire acondicionado y estamos los unos encima de los otros”, añadió, mientras le caían gotas de sudor por la frente.
“¡Tengo la impresión de haber abierto la puerta de un horno!”, exclamó Vanessa Bouisson, una transeúnte de 38 años, tras terminar su jornada laboral.
Las olas de calor serán cada vez más frecuentes en todo el mundo, según científicos, que responsabilizan al cambio climático provocado por el ser humano.
Las temperaturas mundiales nunca habían aumentado en los últimos 2.000 años tan rápido como ahora, según datos publicados el miércoles en dos estudios separados en las revistas Nature y Nature Geoscience.
“TREGUA” CON LOS LADRONES
Los récords cayeron también en varios países del norte de Europa: 42,6 °C en Alemania, 40,6 °C en Bélgica y 40,4 °C en Holanda.
El calor era tal que el metal se dilataba en algunos puentes de Ámsterdam, por lo que empleados de la alcaldía tuvieron que rociarlos con agua para tratar de enfriarlos.
Los ciudadanos adoptaban sus propias estrategias para soportar el bochorno, como Serona Methorst, una estudiante holandesa de 19 años. “Procuro no moverme mucho para no tener demasiado color”, contó, acostada bajo la sombra de árboles en La Haya.
En el centro del país, la policía intentó negociar una tregua con los ladrones y criminales. Lanzó en Facebook un llamado para que se queden “tranquilos”. “!Es muy difícil trabajar en estas condiciones!”, dijeron.
Dos presuntos traficantes incluso llamaron a la policía para que los liberara de un contenedor en el que se quedaron encerrados, con temperaturas que se situaban en torno a los 40 ºC, cuando estaban “sacando droga”, en el puerto de Amberes, en Bélgica.
CENTRAL NUCLEAR CERRADA
En Alemania, la central nuclear de Grohnde, en Baja Sajonia (oeste) cerrará temporalmente el viernes hacia el mediodía, ya que se espera que la temperatura del agua del río Weser alcance el umbral crítico de 26°C en ese momento.
El agua es utilizada para enfriar el reactor y después es vertida nuevamente al río.
La localidad de Herne (oeste) anunció que evacuará a todos los peces de los estanques de la ciudad el viernes para salvarlos, ya que debido al calor, el contenido de oxígeno en el agua se reduce considerablemente. Los peces serán liberados en el Rin.
En plena temporada estival, la empresa ferroviaria alemana Deutsche Bahn informó a sus usuarios que debido a la ola de calor podrán aplazar gratuitamente sus viajes.
El operador de trenes de alta velocidad Thalys, que conecta varias ciudades de Francia, Bélgica, Holanda y Alemania, anunció por su parte la suspensión de la venta de billetes en todas sus líneas por la canícula.
Un tren Thalys que viajaba entre Ámsterdam y París quedó bloqueado este jueves a la altura de la localidad belga de Malinas. Un pasajero dijo a la AFP que se encontraban inmovilizados desde las 15H00 (13H00 GMT) sin aire acondicionado.
Según el servicio de prensa de Thalys, los pasajeros estaban a punto de ser trasladados hacia Malinas.
NIÑO MUERE DESHIDRATADO EN AUSTRIA
En Austria, un niño de tres años murió de deshidratación. Fue hallado inconsciente el lunes en un vehículo estacionado bajo el sol y murió el miércoles.
En Reino Unido el termómetro llegó a 38,1 ºC en Cambridge.
Los servicios de emergencia alertaron a la población de los peligros de refrescarse de forma brusca en lagos, ríos o el mar después de que los cuerpos de tres personas fueran sacados del agua el miércoles.
En cambio, en España las temperaturas bajaron el jueves a valores normales para el verano y sólo 6 de las 50 provincias del país seguían en alerta naranja (que significa “riesgo importante”), según la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET